Cruz Azul volvió a quedarse a un paso de la gloria. Otra vez frente al América. Otra vez con ilusiones que se desvanecen en los últimos minutos.
Porque sí, la Máquina lo intentó. Peleó con fuerza. Pero el América fue más inteligente. Más práctico. Y sobre todo, más efectivo. El resultado: 1-0 en el Estadio Azteca y boleto directo a la gran final del Clausura 2025.
Fue un juego parejo. Con tensión. Con momentos intensos. Pero un error bastó. Una desatención, un pequeño descuido. Kevin Mier, que venía de ser figura, falló justo en el momento más importante.
América Avanza Sin Mucho Brillo
La semifinal de vuelta entre América y Cruz Azul no fue el espectáculo que muchos esperaban. Pero fue efectiva para las Águilas. El equipo de André Jardine supo controlar los tiempos. Cerró espacios. Esperó su momento.
Lo encontró al minuto 61. En un tiro libre sin mucho peligro, Julián Quiñones se metió entre los centrales y cabeceó. No fue un remate demoledor. Pero Mier calculó mal. Se venció antes. Y la pelota entró.
Gol. Silencio cruzazulino. Fiesta azulcrema.
Después, Cruz Azul lo intentó. Con poca claridad, eso sí. Lotti y Sepúlveda entraron para buscar el empate. Pero el América se paró bien. No cedió. Supo enfriar el partido.
Así, con el global 2-1, los de Coapa regresan a una final más. La octava desde que el actual formato se instauró en 2012. Y con una defensa que solo ha recibido un gol en toda la liguilla.
@tudnoficial ¡El América está clasificando a la final! 🤯🔥🦅 #LigaMX #America #CruzAzul ♬ sonido original – TUDN
Cruz Azul y El Fantasma De Siempre
No fue una goleada. Ni una humillación. Cruz Azul parecía distinto. Más sólido. Con un equipo que supo sufrir en momentos difíciles del torneo.
Sin embargo, el fantasma de la “cruzazuleada” apareció otra vez. No con dramatismo. Pero sí con frustración. Porque se quedaron cerca.
Kevin Mier había sido clave en partidos anteriores. Sus atajadas lo convirtieron en figura. Pero esta vez falló. Y su error pesa más cuando es el único del partido. A veces el fútbol es cruel. Y esta fue una noche de esas.
La Máquina tendrá que volver a empezar. Otra vez. Buscar refuerzos. Retocar la plantilla. Y aprender a cerrar partidos grandes. Porque tienen talento. Pero en momentos clave, les falta algo más
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