- Tres Horas De Afectaciones Y Desalojo Masivo
- El Origen Del Problema Y Las Primeras Reacciones
- Molestia Generalizada Entre Los Pasajeros
- Problemas Simultáneos En La Línea 3
- Un Llamado A Mejorar La Red Del Metro CDMX
Un cortocircuito dejó fuera de servicio gran parte de la línea 2 del metro CDMX por más de tres horas y media, causando desalojo de trenes, largas filas y enojo de los usuarios.
Tres Horas De Afectaciones Y Desalojo Masivo
La tarde se tornó caótica para cientos de pasajeros. Alrededor de las 18:00 horas, un tren quedó varado entre Pino Suárez y Zócalo. Una densa humareda comenzó a filtrarse en los vagones.
Algunos pasajeros optaron por cubrirse nariz y boca. Otros, decididos a salir, forzaron las puertas para caminar sobre las vías. La oscuridad del túnel obligó a encender las linternas de los celulares.
En varios casos, los usuarios se ayudaron entre sí para bajar de los vagones. Incluso, elementos del cuerpo de bomberos acudieron a auxiliar en la evacuación. El Sistema de Transporte Colectivo (STC) informó que no hubo personas lesionadas.
#URGENTE 🔴|| 🚇 Caos y humo en la Línea 2 del Metro de la Ciudad de México.
— Primera Línea Mx (@esprimeralinea) August 15, 2025
🤬 El servicio colapsó entre Zócalo y Pino Suárez dirección Taxqueña, donde usuarios fueron obligados a caminar sobre las vías y permanecer en el suelo mientras una densa nube de humo y chispas salía… pic.twitter.com/2DtqQhyGhK
El Origen Del Problema Y Las Primeras Reacciones
De acuerdo con el STC, todo apunta a un cortocircuito en la zona de vías. No hubo explosiones ni incendios, pero sí fallas que interrumpieron el servicio. El director, Adrián Rubalcava, señaló que las lluvias atípicas de los últimos días fueron la causa.
El servicio quedó suspendido en 18 de las 24 estaciones. La afectación fue desde Taxqueña hasta Colegio Militar. Por más de una hora y media no hubo transporte alterno.
En ese lapso, los usuarios buscaron por su cuenta cómo llegar a sus destinos. Las opciones eran pocas y las filas para los camiones de apoyo eran largas. El servicio provisional de Cuatro Caminos a Colegio Militar avanzaba con marcha lenta.
Molestia Generalizada Entre Los Pasajeros
La desinformación aumentó la frustración. Cerca de las 21:00 horas, el director anunció la normalización del servicio. Sin embargo, los trenes solo circulaban hacia Cuatro Caminos, no a Taxqueña.
Los pasajeros reclamaron la falta de transporte alterno efectivo. Señalaron que los camiones no llegaron a todas las estaciones afectadas. La Secretaría de Seguridad Ciudadana tuvo que desplegar camionetas pickup para apoyar.
Estas unidades ayudaron en Pino Suárez, Nativitas y Bellas Artes con dirección a Taxqueña. Pese a ello, muchos usuarios continuaron esperando largos periodos. Johan, usuario de Hidalgo, dijo que acumulaba más de una hora de retraso solo para abordar un transporte.
Problemas Simultáneos En La Línea 3
La jornada comenzó con otro contratiempo. La estación Potrero, de la línea 3, estuvo cerrada de 5:00 a 9:00 horas. La causa fueron anegaciones de hasta 15 centímetros en accesos y pasillos.
Por la tarde, la lluvia volvió a complicar la operación. A las 18:29 horas, los accesos de Potrero se cerraron nuevamente por encharcamientos. Esto se sumó a la tensión ya existente en la línea 2.
El resultado fue un día de caos para miles de usuarios. La saturación del transporte alterno y la falta de información fueron las principales quejas. Muchos piden una revisión integral de toda la red para evitar repetir escenas como esta.
Un Llamado A Mejorar La Red Del Metro CDMX
La combinación de fallas técnicas y condiciones climáticas mostró la vulnerabilidad del sistema. El metro CDMX es un transporte esencial para millones de personas. Sin embargo, incidentes como este reflejan la urgencia de invertir en mantenimiento y prevención.
Los usuarios reclaman comunicación clara y oportuna en emergencias. También exigen que el transporte alterno sea suficiente y eficiente. La confianza en el sistema depende de cómo se resuelvan estas fallas.
Mientras tanto, la jornada quedará en la memoria de los capitalinos. No solo por el tiempo perdido, sino por la experiencia de caminar entre vías oscuras y humo. El reto para las autoridades será garantizar que esto no se repita.
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